Melterian estaba gravemente enfermo. Su núcleo ardía a una temperatura demasiado alta, consumiéndolo diez veces más rápido que a cualquiera de sus colegas de las Fuerzas ardientes. A ese ritmo, se quemaría por completo y moriría en menos de un año. Intentó ralentizar el proceso mediante técnicas de gestión del estrés o de relajación, pero estas resultaron inútiles. En realidad, solo empeoraron las cosas.

Hasta que un día Torog Moltenthroat le hizo una sugerencia tan sencilla que casi sonó absurda: "¿Y si pruebas a refrescarte, literalmente?"

Ese comentario improvisado lo cambió todo. Poco después, Melterian emprendió su camino para unirse a los Moradores de las cimas. No fue tarea fácil: las Fuerzas ardientes y los Moradores de las cimas se encontraban en bandos opuestos del monumental conflicto de Nebotus. Pero una vez que Torog y Tyr Stormbringer acordaron un pacto temporal de paz, Melterian pudo finalmente integrarse en su nuevo grupo y, sorprendentemente, la idea funcionó.

Allí arriba hacía mucho frío. Cualquier otro monstruo se hubiera congelado por completo, pero para Melterian, el frío simplemente devolvió su núcleo a un estado de fusión normal y sostenible.

¡Larga vida a Melterian!

Melterian es un atacante de fuego y agua con torturas.

Rasgo de evolución:
Rango 0: resistente
Rango 1: inmunidad a la congelación
Rango 3: ejecución de estados: aplica una tortura aleatoria a todos los enemigos al principio de su primer turno

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