El origen de las abominaciones se desconoce. Nadie puede determinar el momento específico de la historia de los monstruos en el que surgieron, ni recordar una época en la que no existieran. Fueran visibles o no, los rumores sobre su presencia han sido una amenaza constante.

Dado que las abominaciones no se comunican con otras facciones ni son sociables en absoluto, solo podemos contar su historia según la información que otras facciones tienen de ellas: sabemos cuándo ha estado presente la amenaza, cuándo se les ha visto y cuándo han hecho desaparecer a un par de civilizaciones. Solo sabemos lo que son las abominaciones por el sufrimiento que han causado a otros.

Sin embargo, independientemente de su pasado desconocido, lo cierto es que su futuro ya está aquí. Porque algo ha cambiado. O, mejor dicho, otros las han cambiado. Concretamente desde el laboratorio octaliano, en el corazón de la facción de las Civilizaciones del cosmos. Ahí es donde ha nacido una abominación revolucionaria.

Pero ¿una abominación nacida fuera de su facción es una abominación? Por supuesto. Una abominación es una abominación, independientemente de dónde haya nacido o de las nuevas habilidades que posea. Siempre será única en su especie y formará parte de este enigmático grupo que mantiene al universo entero en vilo.

Dicho esto... Aquí está Voreth Voidspawn. Voreth no ha sido exactamente "engendrado". Robaron su huevo del vacío, pero nació en un laboratorio, lejos de su facción. Allí, antes de que se rompiera su cáscara, lo sometieron a tratamientos y experimentos dentro de su huevo. El resultado ha sido revolucionario: Voreth Voidspawn es una abominación en toda regla, pero es la primera con la capacidad de expresarse de una manera que el resto de los monstruos pueda entender.

Gracias a las primeras interacciones con Voreth, ya hemos aprendido un par de cosas: a las abominaciones no les gusta el ruido. Están muy habituadas al silencio del universo y a su pequeño vacío. Son capaces de oler los colores y saborear el viento. Eh... Nada que decir al respecto. Pero lo más importante para nosotros es que hemos descubierto que las abominaciones se comunican entre sí, tal y como sospechábamos y temíamos. Y Voreth puede comunicarse con otras abominaciones, mientras que el resto de los monstruos solo pueden comunicarse con Voreth, quien, por cierto, no parece muy interesado ni dispuesto a comunicarse con otras especies, a pesar de ser capaz de hacerlo. Ni siquiera con los octalianos, por mucho que estos lo adoren.

El problema es que las Civilizaciones del cosmos han liberado a las abominaciones de su vacío únicamente porque confiaban en que querrían colaborar con ellos y con el resto de la Alianza Maligna de Nebotus, pero... No han pedido pertenecer a ninguna alianza. Ni les gusta el concepto de una alianza.

Quizás eso es algo en lo que alguien debería haber pensado antes de liberarlas al universo. Porque no van a desaparecer fácilmente. Ni siquiera hablando con el revolucionario Voreth Voidspawn.

Voreth Voidspawn es un tanque con torturas, inmunidad a las desventajas de vida, putrefacción, protección de efectos negativos, torturas y explosión de torturas.

Rasgo de evolución:
Rango 0: sobrenatural
Rango 1: ejecución de estados: aplica putrefacción a todos los enemigos al principio de su primer turno
Rango 3: aumenta la vida máxima
Rango 4: ejecución de estados: aplica un escudo vital del 50% a todos los aliados al principio de su primer turno
Rango 5: protección de rasgo

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