Los Guardianes de la tierra, dirigidos por Kiridar y Vastus, destaparon al malvado Dr. Hazard y sus crímenes contra la naturaleza hace un tiempo. Después de eso, perdió a todos sus clientes del laboratorio: nadie quería estar relacionado con él de ninguna forma. Lo único en lo que pensaba era en formas en las que podía humillar a esos Guardianes, pero con Vastus de por medio tenía que pensar bien antes de actuar.

Cuando un trozo de polvo estelar cayó en sus manos, su primer impulso fue usarlo en sí mismo, pero después se lo pensó mejor. Necesitaba dos cosas: discreción y una forma de llegar hasta los Guardianes, que ahora eran viajeros espaciales. Encontró la solución a su problema en la última criatura viviente que quedaba en su laboratorio y fábrica: un ajolote. Dr. Hazard lo encontró cuando estaba a punto de asfixiarse con un trozo de plástico, pero lo cogió y lo salvó. Tenía un aspecto tan adorable e inocente... era perfecto para su plan.

Dr. Hazard se llevó a la diminuta criatura a su fábrica y comenzó los preparativos. Construyó un meca con metal oxidado y hojas, para que resultara atractivo a los Guardianes. Después, colocó al pequeño ajolote en su interior. Por último, le dio el toque final al núcleo del meca: un chip inteligente con el que el ajolote le obedecería y el trozo de polvo estelar. Ya estaba listo.

Envió a Axolmech al espacio con la misión de infiltrarse entre los Guardianes como si fuera uno de ellos y acabar con ellos tan pronto como hubiese descubierto sus puntos débiles.

Axolmech es un tanque de natura con habilidades como provocación, daño espejo y curación. Tiene un rasgo de evolución: en el rango 0 tiene provocación, en el rango 1 se convierte en resistente y en el rango 3 obtiene regeneración al principio de cada batalla.