Después de que Quaxalcroc usurpara el trono de los aztecas, todos pensaron que el antiguo emperador desaparecería para siempre. Pero la corona había estado en la dinastía de Mountezuma durante siglos y él no iba a dejarla escapar tan fácilmente. Tenía un as bajo la manga, literalmente. Fue allí donde escondió la única joya que pudo llevarse al exilio. Solo tenía esa joya, pero era la única que necesitaba.

Mountezuma se dirigió a las afueras del imperio. Allí estaba el monumento de su antepasado más antiguo y el fundador del imperio, Azte. Cogió la joya y la colocó dentro de un pequeño agujero que tenía la estatua, despertando así al espíritu de Azte.

Azte fue un emperador justo y querido, nada que ver con su descendiente Mountezuma. ¿A quién apoyará? Al fin y al cabo, Mountezuma no ha traído más que vergüenza a su dinastía de emperadores, ¡pero Quaxalcroc acabaría con ella!

Azte es un monstruo de control de natura con habilidades de posesión. También puede aplicar veneno y reducción del daño a todos sus enemigos u obtener tercer ojo y perder sus efectos de estado. Azte tiene un rasgo de evolución: en el rango 0 es inmune ante el noqueo, en el rango 1 se convierte en inmune al veneno y en el rango 3 obtiene precisión al principio de cada batalla.