Mountezuma es el líder divino, el chamán y el protector de su propio imperio reptil dentro de la civilización azteca. Su arrogancia no tiene fin y ostenta él solo todos esos cargos porque cree que está por encima del resto, incluso de Kulkan. A este no lo considera más que un simple guardia, pese a sus habilidades demostradas y sus magníficos logros.

Es controlador tanto fuera como dentro del campo de batalla: Sus habilidades de posesión son perturbadoras para sus siervos. Para sus rivales son terroríficas, ya que pueden pasar hasta dos turnos atacando a su propio equipo. Este emperador es maligno y desconfiado: puede envenenar a sus rivales y activar su recuperación simplemente por verlos indefensos y sin poder.

Muchos han tratado de rebelarse contra él, pero no hay quien le derroque. Su rasgo Montaña le hace resistente como emperador y sobre todo como rival, pues no le afectan ni la congelación ni el noqueo.